Willian Shakespeare dijo:"Siempre me siento feliz, ¿sabes por qué? Porque no espero nada de nadie, esperar siempre duele". Yo también añadiría al "nadie", que no espero "nada". Pero lo más importante de haber llegado a pensar de esta manera es que me lo ha enseñado un ratoncito de seis años, mi pequeño Alejandro.
Mi ratón es feliz, dando todo el amor que tiene en su gran corazón, enfrentándose a la vida con fuerza, ganas y energía, desde el minuto cero de su vida. Mi chico va superando las barreras que la vida le ha impuesto, pero las supera con una sonrisa, creo que simplemente porque para él no son barreras, para él, como para cualquier otro niño o niña, es el aprendizaje de la vida. Nosotros veíamos su futuro difícil, pero todos los padres ven difícil el futuro de sus hijos... Él nos ha enseñado que es normal que nos preocupemos por su futuro, lo anormal sería no hacerlo, porque somos sus papás y le amamos infinitamente.
Alejandro nos ha enseñado que las fiestas del colegio no solo están llenas de niños que corren y gritan, también están llenas de niños que van en sillas de ruedas, se expresan con signos, niños que no ven pero sienten y escuchan; Alejandro nos ha enseñado que lo que tienen en común todas las fiestas de los colegios son las risas, la emoción contenida a veces y otras no, el orgullo de profesores y padres, el compartir unas horas de diversión por el trabajo realizado durante todo un año...
Mi héroe, nos ha dado una visión de la vida diferente: vivir sencillamente sin esperar nada, simplemente vivir, salvando los obstáculos, sintiéndonos orgullosos de él, de nuestra familia, de nuestro amor, de levantarnos cada vez que nos caemos.
Soy su mamá, una mamá orgullosa como la que más, una mamá que intenta educar, enseñar, ayudar y apoyar a su hijo, pero sobre todo, soy una mamá a la que su hijo le ha enseñado el verdadero significado de las palabras: VIDA, AMOR, LUCHA y ENTREGA.
No puedo decir nada más, soy corta en palabras, solo añadir:
TE AMO ALEJANDRO.
Macarena
Mi ratón es feliz, dando todo el amor que tiene en su gran corazón, enfrentándose a la vida con fuerza, ganas y energía, desde el minuto cero de su vida. Mi chico va superando las barreras que la vida le ha impuesto, pero las supera con una sonrisa, creo que simplemente porque para él no son barreras, para él, como para cualquier otro niño o niña, es el aprendizaje de la vida. Nosotros veíamos su futuro difícil, pero todos los padres ven difícil el futuro de sus hijos... Él nos ha enseñado que es normal que nos preocupemos por su futuro, lo anormal sería no hacerlo, porque somos sus papás y le amamos infinitamente.
Alejandro nos ha enseñado que las fiestas del colegio no solo están llenas de niños que corren y gritan, también están llenas de niños que van en sillas de ruedas, se expresan con signos, niños que no ven pero sienten y escuchan; Alejandro nos ha enseñado que lo que tienen en común todas las fiestas de los colegios son las risas, la emoción contenida a veces y otras no, el orgullo de profesores y padres, el compartir unas horas de diversión por el trabajo realizado durante todo un año...
Mi héroe, nos ha dado una visión de la vida diferente: vivir sencillamente sin esperar nada, simplemente vivir, salvando los obstáculos, sintiéndonos orgullosos de él, de nuestra familia, de nuestro amor, de levantarnos cada vez que nos caemos.
Soy su mamá, una mamá orgullosa como la que más, una mamá que intenta educar, enseñar, ayudar y apoyar a su hijo, pero sobre todo, soy una mamá a la que su hijo le ha enseñado el verdadero significado de las palabras: VIDA, AMOR, LUCHA y ENTREGA.
No puedo decir nada más, soy corta en palabras, solo añadir:
TE AMO ALEJANDRO.
Macarena
gracias, por publicarlo,
ResponderEliminarPrecioso!!!!!!
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